“Los sentidos son puertas por las cuales el mundo entorno entra al universo humano y por las cuales éste sale a aquél. El espíritu encarnado, que es el hombre, se desarrolla en el diálogo con la revelación de sentido que ininterrumpidamente está entregando al mundo.”

Fidel Sepúlveda

Uno de los grandes tesoros que podemos entregarles a nuestros niños y niñas es el trabajo de los sentidos, que como bien dice Fidel Sepúlveda, son las puertas de entrada de las vivencias y experiencias que les entrega el mundo. 

Puede ser que hoy, trabajar estos sentidos requiera de una búsqueda más consciente que antes, ya que el acceso a ellos, es menos directo, dado el tipo de vida de nuestra sociedad actual; el uso desmedido de la tecnología, la escolarización e intelectualización temprana, la privación de naturaleza, rutinas inconsistentes y aceleradas, escasos momentos y espacios de juego libre y movimiento, juguetes sobre estimulantes y artificiales y cuidados y trato impersonal o descuidado, son algunos factores que interfieren en el desarrollo sensorial, causando muchas veces condiciones desfavorables en el desarrollo y en el aprendizaje. 

Los 12 sentidos de los que nos habla Steiner nos ayudan a entender el desarrollo sensorial en la infancia, permitiéndonos educarlos de manera saludable. 

Éstos 12 sentidos se dividen en 3 grupos: los Sentidos Basales o Corporales, los Sentidos Medios o Ambientales y los Sentidos Superiores o Cognitivos. 

Todos estos sentidos requieren de un cuidado consciente, poniendo atención a aquello a lo que exponemos al niño y niña, ya que conforman sus sentidos de percepción del mundo y constituyen su cotidiano, articulando sus vivencias y experiencias que a su vez componen y esculpen su ser.

“Pensamos que no se educa el oído en la estridencia. Ahí se angosta y mata el oído. La estridencia genera sordos. El silencio desarrolla el oído desde la escala de lo audible hasta la de lo inaudible con el oído físico, pero audible con el oído con el que se escucha el sonido del espíritu.” Fidel Sepúlveda

Los 4 Sentidos Basales son sentidos de autopercepción del propio cuerpo y se desarrollan de manera crucial durante el primer septenio, o sea de los 0 a los 7 años.

Estos son: Vital (sentido de Bienestar), Tacto, Movimiento propio (Propioceptivo) y Equilibrio (Vestibular). 

Referencias:

Los 12 sentidos. Rudolf Steiner.

Educación de los sentidos y sentido de la educación. Fidel Sepúlveda